jueves, 31 de diciembre de 2009

Pinches ricos

-¿A Madrid? Estás loca. ¿A hacer que?

- Pues para comprar una nieve italiana en Sol (yo pido de chocolate). O buscar algún concierto en la ciudad (en Casa de Campo, tal vez) y bailar hasta el amanecer. Ya sé, no te gusta mucho bailar. Entonces podemos comer tapas en la cava baja hasta reventar. Y comprar vino en el Corte Inglés y tomarlo frente algún edificio centenario (acuérdate de siempre cargar con destapacorchos). Si vamos en verano, podemos quedarnos dormidos en algún jardín con vista al Palacio, y si es invierno, nos aventaremos en trineo en Navacerrada. No importa la estación de año, siempre podemos tomar cañas con su infaltable ración de jabugo. También conseguiremos fotos prohibidas de museos (usamos el móvil). En domingo, será infaltable la búsqueda de tesoros en el Rastro. Disfrutaremos el atardecer desde las Vistillas contando las primeras estrellas. A medio día, nos tiraremos en el piso de la Plaza Mayor para ver el azulísimo cielo escapar. Bailar (¡Sí!, bailar, no me veas así) toda la noche tomando cubatas en muchos antros y amanecer en con el chocolate y churros de San Ginés. Le inventaremos historias a las esculturas que se encuentran en los techos de la Gran Vía. Y esperaremos el tren en Atocha mientras nos damos un beso de estación.

-¡jajaja! parece que lo tienes todo planeado. Lástima que tengamos las tarjetas a full.

-Bah, nada pierdo con soñar.

-Ya loquita, mejor tiende la cama con el edredón de plumas en lo que yo voy por el ipod. Y nos quedamos acostados todo el día, ¿va?

-¿En lunes? Que pinches ricos somos.